Diabetes, estilo de vida y enfermedad cardiovascular

RECUERDE QUE… El riesgo de enfermedad cardiovascular es más elevado en personas con diabetes que en la población general. La mayoria de factores de riesgo son modificables mediante cambios en el estilo de vida y fármacos (en caso necesario).

La información contenida en esta entrada es complementaria a las recomendaciones impartidas por los profesionales sanitarios, en ningún caso sustituye a estas.

Las enfermedades cardiovasculares (infarto de miocardio, embolias cerebrales…) constituyen uno de los problemas sociales de salud más importantes, por que generan elevados costos en vidas humanas y en recursos económicos. Su frecuencia ha ido aumentando en las últimas décadas y no parece decrecer. Esto es debido al aumento en la longevidad y mejora en el pronostico de otras enfermedades; también contribuyen la alimentación rica en grasas saturadas y azúcares, la inactividad física, el tabaquismo, el estrés, el exceso de peso, la hipertensión arterial y la concentración elevada de colesterol en sangre.

RECOMENDACIONES

La alimentación debe ser:

• Suficiente, para mantener un peso adecuado.
• Equilibrada, en la proporción apropiada de cada grupo de alimentos.
• Variada, de modo que contenga suficientes verduras, frutas, cereales y legumbres; carne, pescado y huevos en moderación (con reducción en el contenido graso) y aceites vegetales.
• Ordenada, en cantidades, número de ingestas (idealmente tres principales y 2-3 pequeños suplementos) y horarios.
• Con moderación en el alcohol (12 vasos de vino en adultos, sino existen contraindicaciones).

En resumen, la idea es “comer de todo sin abusar de nada”.

La actividad física debe ser adaptada a la edad, capacidad, gustos y posibilidades de cada persona. Está demostrado el efecto beneficioso de caminar 30-45 minutos diarios. En cambio, el ejercicio extenuente puede ser peligroso, especialmente en personas no entrenadas y sin una evaluación cardiaca previa.

El hábito de fumar es el principal factor de riesgo evitable. Dejar de fumar no es fácil por que la adicción que provoca la ncotina suele ser muy potente aunque existen recursos cada vez más eficaces para conseguirlo como los sustitutos de nicotina (chicles, parches…), fármacos y psicoterapia de apoyo.

El nivel de stress de la sociedad moderna es muy elevado y su influencia sobre las enfermedades cardiovasculares está comprobada. El deporte, algunas aficiones, técnicas de relajación, apoyo social, etc., pueden ayudar a disminuirlo.

El exceso de peso conlleva riesgos, especialmente por su asociación a hipertensión y a alteraciones metabolicas como la diabetes y la dislipidemia, de modo que conseguir un peso razonable debe ser un objetivo prioritario de salud.

Las dislipidemias (alteraciones de las grasas de la sangre) son corregibles mediante una alimentación adecuada y también con fármacos.

La hipetrtensión arterial es un factor de riesgo importante que puede tratarse con éxito con la restricción de sal y determinados medicamentos.

La diabetes es indiscutiblemente oto factor de riesgo que empeora el pronostico cardiovascular, especialmente cuando su control es inadecuado. Por este motivo las personas que la padecen deben ser especialmente sensibles a la correción de los demás factores.

Elaboró: QF. Ramón Largo Bañol
Servicio Farmacéutico