La resonancia magnética es el método diagnóstico más eficaz para obtener imágenes del cerebro, de la médula espinal, del corazón, los vasos sanguíneos, el sistema óseo muscular, las articulaciones, y las mamas.
Con la resonancia magnética se pueden diagnosticar problemas del corazón como
Tamaño y función de las cámaras del corazón, El grosor y movimiento de las paredes del corazón, Extensión del daño causado por ataques cardíacos o enfermedades cardíacas, problemas estructurales en la aorta, como aneurismas o disecciones, Inflamación o bloqueos en los vasos sanguíneos.
A nivel de cerebro y médula espinal se pueden diagnosticar problemas como:
Aneurismas de los vasos del cerebro, trastornos del ojo y del oído interno, esclerosis múltiple, trastornos de la médula espinal, accidente cerebrovascular, tumores, y lesiones cerebrales a causa de un traumatismo.
La resonancia magnética puede detectar tumores u otras anomalías de muchos órganos del cuerpo, como: Hígado y conductos biliares, riñones, bazo, páncreas, útero, ovarios, y próstata.
la (RM) ayuda a identificar anomalías en las articulaciones causadas por lesiones traumáticas o reiteradas, como cartílago o ligamentos dañados, anomalías de los discos en la columna vertebral, infecciones óseas, tumores en huesos y tejidos blandos.